En su libro "La Ética del Hacker y el Espiritu de la Era de la Información", Pekkan Himanen introduce la verdadera cara del hacker. Al día de hoy tenemos la concepción de que el hacker es aquel quien programa con el simple propósito de hacer el mal dentro de las redes electrónicas. Catalogamos al hacker como aquel rebelde quien busca la manera de robar identidades u otros documentos personales electrónicos.
Lo interesante de esta lectura es que se puede ver como Pekkan describe al hacker de una manera totalmente diferente. Pekkan Himanen describe al hacker como una persona cuya pasión es la de programar y cuyo propósito es de llevar todos estos avances que el mismo consiga programando al mundo.
Algo también interesante es la forma en que el hacker efectúa su trabajo. Al inicio del texto se encuentra un prefacio hecho por el programador Linus Trovalds quien expresa su ley la cual dice que el ser humano tiene tres motivaciones principales: supervivencia, vida social y entretenimiento. El mismo continua explicando que para el hacker las cosas son ya un poco diferentes.
Para el hacker la supervivencia no es un prioridad, este puede mantenerse sin problemas a base de comida chatarra. Para el hacker la vida social tampoco es una prioridad puesto a que tiene sus maquinas para poder comunicarse con el mundo exterior. La prioridad numero uno del hacker es el entretenimiento, de hecho Linus explica que la única razón por la cual la mayoría de los hackers hacen lo que hacen es porque los entretiene. Para el hacker lo mas interesante es poder programar sin parar y descubrir las nuevas cosas que este puede descubrir o efectuar gracias a la programación.
Para poder explicar este "fenomeno" el texto explica que existen dos tipos de éticas: la protestante del trabajo y la preprotestante cristiana.
La etica protestante del trabajo indica que para que puedas ser útil dentro de la sociedad debes de siempre trabajar. Esta indica que la semana, en términos de trabajo, no se acaban los viernes o los sábados sino que el ser humano debe de trabajar todos los días, si pertenecer a la sociedad es o que el quiere.
La etica preprotestante cristiana, por el otro lado, tiene, obviamente, raíces de la religión cristiana la cual indica que aunque se tenga que trabajar siempre debe de haber un día de descanso. Se pone el ejemplo de Jesús, este solo trabajaba seis días a la semana y uno lo tomaba para descansar. Es con esta ética que el hacker más se identifica. Es cierto que la labor del hacker es muy compleja y demandante, pero este maneja su tiempo de acuerdo a sus necesidades y cuando este siente qu debe de descansar lo hará puesto a que este "labor" suyo no es un labor en si sino una pasión y, por ende, al hacker no le molestaría dormirse trabajando a las 6 de la mañana para luego despertarse y continuar su labor a las 4 de la tarde.
Comentarios
Publicar un comentario